jueves, 9 de mayo de 2013

Jabon casero

En realidad esta entrada no la he buscado para hacer jabon si no que buscaba alguna solucion para el aceite usado aparte de llevarlo a los puntos de reciclaje,yo no soy muy ecologista que digamos pero hay algunas cosas que son un horror ecologico como es tirar el aceite usado por el fregadero o por el inodoro y ya no digamos el aceite del coche,vamos a mirar una mijitita por el planeta que van a heredar nuestros hijos,bueno sin mas dilacion os dejo la receta, yo la hice con aloe vera ya que tengo una planta muy hermosa.
Ingredientes:
    500 g de sosa cáustica (en droguerías).
    3 litros de aceite usado (de la freidora, sin filtrar).
    3 litros de agua.
    Un puñadito de polvos de lavar (para dar olor).
    Opcional: aceites esenciales de lavanda, romero, limón o bien, ramitas secas de plantas aromáticas ,yo como os dije puse aloe vera.
   
Preparación:
    Muy importante: situarse en un lugar ventilado para fabricar el jabón casero.
    En un recipiente grande (un barreño, un cubo de plástico, puchero grande), se vierte la sosa cáustica y sobre ella el agua, con cuidado para que no salte la sosa cáustica, que quema remueve hasta que se disuelva la sosa.    Añade el aceite sucio (antiguamente también se echaba sebo animal para que cuajara antes)  poco a poco y ve moviendo con un palo de madera siempre en la misma direccion. Esta es la parte más pesada del trabajo, ya que tendrás que emplear de  una hora a hora y media(ahora que muchos estamos parados no hay bulla), hasta conseguir que cuaje.se me olvidaba aprox. a la hora echa la aloe vera que antes habremos pelado y triturado hasta hacer una crema y los polvos de lavar. La sosa cáustica quemará el aceite, y a medida que se vaya enfriando verás cómo obtienes una mezcla espesa blanquecina.
    Repártelo en latas cuadradas grandes y de no demasiada altura (como las antiguas de membrillo) a las que habrás realizado un orificio en la base previamente.
    Sitúa las latas encima de un cartón absorbente. La idea es que repose el jabón y que se desprendan las últimas gotas de aceite que hayan podido quedar. Una vez que ha reposado dos o tres días, ya puedes cortarlo en trozos.